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Conocer epilepsia: Medicina herbaria
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¿Qué es epilepsia?
La epilepsia es una enfermedad neurológica crónica caracterizada por la predisposición a sufrir convulsiones recurrentes. Estas convulsiones son episodios breves de actividad eléctrica anormal en el cerebro, que pueden provocar cambios en el comportamiento, sensaciones inusuales, movimientos incontrolados del cuerpo o pérdida de conciencia.
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Detalles sobre el mal
La epilepsia puede manifestarse de diversas formas y tener diferentes causas. Algunas personas experimentan convulsiones generalizadas, que afectan a todo el cerebro, mientras que otras pueden tener convulsiones focales o parciales, que comienzan en una parte específica del cerebro. La causa de la epilepsia puede ser:
- Lesiones cerebrales: Traumatismos craneoencefálicos debido a accidentes, caídas, lesiones deportivas o heridas de guerra pueden causar daño cerebral que aumenta el riesgo de desarrollar epilepsia.
- Trastornos cerebrales en desarrollo: Anomalías cerebrales presentes desde el nacimiento, como la esclerosis tuberosa, la neurofibromatosis o la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), pueden predisponer a la epilepsia.
- Trastornos genéticos: Algunas formas de epilepsia tienen una base genética. Ciertas mutaciones genéticas pueden aumentar el riesgo de convulsiones y epilepsia en algunas personas.
- Infecciones cerebrales: Infecciones como la meningitis, la encefalitis y otras infecciones del sistema nervioso central pueden dañar el cerebro y desencadenar convulsiones.
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Otras causas
- Tumores cerebrales: Los tumores cerebrales pueden ejercer presión sobre el cerebro o interferir con su función, lo que puede provocar convulsiones y epilepsia.
- Accidentes cerebrovasculares: Los accidentes cerebrovasculares, que pueden causar daño cerebral debido a la falta de flujo sanguíneo al cerebro (accidente cerebrovascular isquémico) o sangrado en el cerebro (accidente cerebrovascular hemorrágico), pueden aumentar el riesgo de epilepsia.
- Traumas en el parto: Daños cerebrales causados durante el parto, como hipoxia neonatal (falta de oxígeno), pueden aumentar el riesgo de epilepsia en bebés.
- Abuso de drogas o alcohol: El abuso de drogas o alcohol puede aumentar el riesgo de desarrollar epilepsia.
- Enfermedades neurodegenerativas: Algunas enfermedades neurodegenerativas, como la enfermedad de Alzheimer y la enfermedad de Parkinson, pueden aumentar el riesgo de epilepsia en etapas avanzadas de la enfermedad
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Algunas síntomas de la epilepsia
Los síntomas de la epilepsia pueden variar según el tipo de convulsión y la persona afectada. Algunos de los síntomas comunes de la epilepsia incluyen:
- Convulsiones: Las convulsiones son el síntoma más característico de la epilepsia. Pueden manifestarse de diferentes maneras, como convulsiones tónico-clónicas generalizadas (anteriormente conocidas como convulsiones de gran mal), que involucran movimientos violentos y pérdida de conciencia, o convulsiones focales (anteriormente conocidas como convulsiones parciales), que pueden comenzar en una parte específica del cerebro y pueden involucrar movimientos anormales, sensaciones extrañas o cambios de conciencia.
- Sensaciones anormales: Antes o durante una convulsión, algunas personas pueden experimentar sensaciones inusuales o auras, que pueden incluir sensaciones de miedo, desorientación, sensaciones de hormigueo, cambios en el gusto o el olfato, y otros síntomas sensoriales anormales.
- Movimientos involuntarios: Durante una convulsión, pueden ocurrir movimientos involuntarios, como sacudidas de brazos y piernas, movimientos de masticación o de la cabeza, o movimientos automáticos repetitivos.
- Pérdida de conciencia: Algunas personas pueden perder temporalmente la conciencia durante una convulsión, especialmente en convulsiones generalizadas.
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Diagnóstico
El diagnóstico de la epilepsia se basa en la historia clínica del paciente, los síntomas reportados, exámenes neurológicos y pruebas como electroencefalogramas (EEG) y resonancias magnéticas del cerebro.
Complicación de la epilepsia
La epilepsia puede presentar una serie de complicaciones, algunas de las cuales pueden tener un impacto significativo en la calidad de vida de las personas afectadas. Algunas de las complicaciones más comunes asociadas con la epilepsia incluyen:
- Lesiones físicas: Durante una convulsión, las personas pueden sufrir lesiones físicas como caídas, fracturas, cortes u otras lesiones traumáticas.
- Lesiones cerebrales: Las convulsiones recurrentes pueden dañar el cerebro con el tiempo, lo que puede provocar problemas cognitivos, dificultades de aprendizaje, deterioro de la memoria y otras alteraciones neurológicas.
- Problemas psicosociales: La epilepsia puede afectar la salud mental y emocional de las personas afectadas, así como su calidad de vida y relaciones interpersonales. La estigmatización social, la ansiedad, la depresión y otros problemas psicosociales son comunes en personas con epilepsia.
- Problemas de seguridad: Las convulsiones pueden aumentar el riesgo de accidentes, especialmente en entornos peligrosos como al conducir, bañarse o trabajar con maquinaria pesada.
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Otras consecuencias del mal
- Problemas de desarrollo: La epilepsia que comienza en la infancia puede afectar el desarrollo cognitivo, emocional y social del niño, lo que puede afectar su rendimiento académico, relaciones sociales y calidad de vida en general.
- Problemas reproductivos: Algunos medicamentos antiepilépticos pueden afectar la fertilidad y el desarrollo del feto durante el embarazo, por lo que es importante que las mujeres con epilepsia reciban atención prenatal especializada.
- Lesiones dentales: Las convulsiones pueden provocar lesiones en la boca, los dientes y las encías, especialmente si una persona se muerde la lengua o tiene espasmos mandibulares durante una convulsión.
- Problemas de sueño: Las convulsiones nocturnas pueden interrumpir el sueño y causar somnolencia diurna, fatiga y otros problemas relacionados con el sueño.
Es importante tener en cuenta que no todas las personas con epilepsia experimentarán todas estas complicaciones, y muchas personas con epilepsia llevan vidas plenas y satisfactorias con un manejo adecuado de su condición. Sin embargo, es fundamental que las personas con epilepsia reciban un seguimiento médico regular y un tratamiento adecuado para prevenir o manejar cualquier complicación que pueda surgir.
¿Cómo tratar la epilepsia?
El tratamiento de la epilepsia puede incluir medicamentos antiepilépticos para controlar las convulsiones, cirugía para extirpar la parte del cerebro que causa las convulsiones en casos específicos, estimulación del nervio vago u otros tratamientos. El objetivo del tratamiento es reducir la frecuencia y la gravedad de las convulsiones, mejorar la calidad de vida del paciente y minimizar los efectos secundarios de los medicamentos.
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Tratamiento natural de la epilepsia
Los remedios naturales sirven de apoyo contra las crisis de epilepsia. Si bien no remplazan los medicamentos, su consumo regular dentro de un estilo de vida saludable puede contribuir con el bienestar.
- Infusión de corteza de tilo:
Según las encuestas, las propiedades sedantes de la corteza de tilo ayudan a relajar el sistema nervioso. Asimismo, una investigación llevada a cabo por estudiantes de una Universidad de México encontró que la tila contribuía a controlar la hipertensión, lo que ayudaría en los episodios de epilepsia.
- Té de valeriana, uno de los remedios naturales para la epilepsia
Un estudio publicado en 2010 por la Revista Biomédica señala que la valeriana contiene isovaleramida (principio que actúa sobre el sistema nervioso central como un anticonvulsivo). De esta forma, tiene propiedades relajantes y sedantes, que contribuyen a calmar la ansiedad. Además, es beneficiosa para tratar el insomnio o cualquier problema de sueño.
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Otras plantas medicinales en el tratamiento natural de la epilepsia
- Alcohol de artemisa
Un experimento desarrollado por varios investigadores del Instituto de Neurología y Neurocirugía de la Habana encontró que los extractos orgánicos de la artemisa contienen principios activos que benefician la salud nerviosa y cerebral; lo que sería de utilidad para los casos de epilepsia.
- Té de hojas de naranjo, uno de los remedios naturales para la epilepsia
Al igual que otras bebidas naturales relajantes, el té de hojas de naranjo reduce la hiperactividad del sistema nervioso gracias a sus efectos sedantes.
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